Tragos Y Jama Sangucheria Bar

La opciones que cuenta en cuanto a hambuerguesa es variada. En este caso opte por Hamburguesa Huachana vino lo que pedi lo que di me parecio muy pequeña la hamburguesa pero edtuvo delicioso el plato. Para tomar pedimos una jarra de mojito la cual se encontraba con el hielo preciso hasta terminarla, si me gusto la atencion. Tiene una buena vista directa a la plaza de armas.

Pasé por este lugar y entre a probar sus sandwiches, tienen varias opciones, yo fui por el de pollo con tocino y queso, estuvo bueno ;) acompañado de una porción de papas fritas. Los trabajadores se mostraron atentos, el lugar es abierto en el frente, con vista a la plaza. Considero que podrían colocar ventiladores, para que sea mas fresco.

Una cosa es el local que está bien ambientado y otra cosa es la comida. La atención no me gusto, primero me quisieron cobrar más de lo que consumí, confundieron mi pedido y la comida estuvo mala. Me parece un lugar que no refleja lo que cuesta su comida. El sandwich de lomo saltado eran 2 pedacitos de bisteck, por que ni siquiera era lomo, 3 cebollas, 2 pedazos de tomate y un sabor a cubito maggie que, denotaba que los cocineros son aprendices. Esta gracia me costo 13 soles y me parece que por 13 soles podrían haberme dado algo mejor. Lo peor de todo es que estaba acompañado de un buen amigo que era chef así que no hay más que decir si no fuera por su ubicación no volveria.

Al principio se llamaba Tragos & Jama (o algo así), el lugar es lindo, y queda frente a la plaza. Vendían sanguches y en la noche tragos, es un ambiente familiar hasta las 7 pm, luego ya no, porque se convierte en un bar. Es un concepto interesante, pero para salir con los chicos es mejor ir temprano. Ahora venden sanguches como una especie de fast food tropical y le han puesto un letrero al costado de hamburguesas. Ya no tengo claro si se sigue llamando Tragos Y Jama (porque el letrero sigue) o es el nuevo local, o son dos negocios en el mismo espacio físico. En fin. Lo cierto es que los sanguches son abundantes y solo tener cuidado con preguntar bien lo que traen, porque las fotos pueden ser engañosas. Por lo demás, buen lugar para conversar y comer algo en familia y con los amigos. No es caro para la ubicación que tiene.

El ambiente es muy cálido y acogedor, además los propietarios aceptan siempre sugerencias. Lo mejor de todo es que tienen buena música, se vive una muy buena atmósfera. Un lugar encantador, como en casa.