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Contribuisci feedbackLa decoración es de lo más hortera que he visto , es una pena que una casa antigua con tanto potencial se vea así por el mal gusto al decorarla , las teteras están viejas y le dan un gusto asqueroso y al los tes, además de ser poco higiénico, por no hablar de las shisas del año de la pera , la comida no está mal pero no es tan buena como para ponerla tan cara ni de broma , no es alta cocina .... Es cocina de aficionados . Le falta gusto y humildad a raudales, además los dueños están flipados y son muy altivos. ..una cura de humildad les vendría genial .
Hace bastante tiempo que no iba a este establecimiento y cuando me comentaron que ahora también daban servicio de cena no pude resistirme a volver. La verdad es que me decepcionó bastante ya no solo porque todo tenía un aspecto descuidado (el mantel tenía un chicle de otras personas que habían ido anteriormente, el menú eran dos cartulinas recortadas con los platos escritos a mano y una pinza que los unía, las cartas de infusiones rotas y sucias.... Éramos 4 personas y pedimos todo al centro: ensalada de aguacate, pastela moruna y pollo tica massala. La ensalada no estaba mal, la pastela no me gustó demasiado porque el relleno estaba súper seco y el pollo era su “interpretación” porque no tenía nada que ver a la receta original, eran tiras de pollo empanado con lombarda y cebolla morada cruda y un fondo de salsa de pistacho. No era lo que pedí y me sentí engañada.
JAJAJAJAJ hay que ser cutre, venimos a tomar unas copas. Y pedimos si nos pueden echar una pizca más de ron y Ginebra en dos de ellas, que veíamos un poco cortas. Viene el camarero y dice literalmente jajaja esto es como todo, cuanto más azúcar más incrementa el precio ? Nos traen otro ticket distinto, en el que pone que hemos pedido OTRO cubata. ¿7€ por una copa, más 3.5€ por el chorrito de más? Veo estupendo que si echa más alcohol tenga que cobrar algo más. Pero de ahí a pedirme el valor de media copa más mientras se ríe al hacerlo... Tendremos que buscar otro sitio para cenar... Qué remedio... Si hacen eso con los detalles a saber la que nos meten con la cena. Nada recomendable.
Fuimos a probar los platos vegetarianos. La ensalada con mango estaba deliciosa, y las quesadillas estaban increíbles. El camarero es muy amable y te aconseja muy bien. ¡Volveremos!
Una vivienda histórico en el paseo de la Libertad de Albacete acoge este sitio: bar, tetería, copas, picoteo.... tanto de día como de noche, un lugar donde disfrutar de un entorno que parece un decorado decimonónico, con toques de modernidad. Platos ricos y servicio amable. Inconvenientes: huele a tabaco en el local, algunos sitios son incómodos y no cobran con tarjeta imperdonable en pleno siglo XXI .