Calma Brunch&coffee - CHOLUL

Estaba pasando con mis amigos buscando un lugar para desayunar y nos encontramos este. El servicio fue amable por parte de todo el personal, éramos como 9 personas y nos ayudaron a poder ubicarnos bien. En general, siempre muy atentos de ti. Por otro lado, la comida estuvo espectacular. Los chilaquiles estaban muy buenos, junto con el frijol. Pero lo que más me gustó fue el baguette que tiene jamón serrano, queso crema, champiñones, no recuerdo muy bien su nombre, la verdad, pero eso contiene. Les recomiendo a ese baguette en específico ponerle mucho chipotle. No te vas a arrepentir. Tuve un pequeñito inconveniente con un baguette pero me supieron resolver rápido y sin demoras. Un error lo comete cualquiera. El latte frío que pedí estaba bueno, pero sentí que le faltó un poco más de café, se sentía muy breve la presencia del mismo. Sin dudas regresaría aquí a pedir exactamente lo mismo. Lo recomiendo mucho.

Nos ha fascinado este cómodo lugar, pues estábamos de paso en Caucel buscando donde desayunar pero muchos lugares se nos hacían un poco costosos y ahí fue donde nos encontramos con Calma. Realmente nos encantó pues contaba con varios alimentos y nada caros, así como sus bebidas que tenían gran sabor. El servicio fue muy bueno a pesar de ser pocos atendiendo pero se ve que están llenas de alegría y saben como enriquecer a los clientes. Visita Calma un lugar para relajarte, platicar y olvidarte de tus malos problemas!!

Probamos una baguette, estaba deliciosa y nos encanto. También pedimos un brownie, lo calentaron antes de llevarlo a la mesa, estaba crunchie y delicioso. Espero poder volver para probar alguna de sus bebidas, siempre fueron amables y atentos

El lugar es bonito, las sillas, la mesas, la decoración e iluminación, he ido dos veces para corroborar los comentarios de abajo, y en efecto el baño les hace falta mejorar ciertos puntos, la atención a veces el buena, a veces mala, son un poco tardados en la atención, la comida la primera vez que fui fue excelente, aunque una de mis amigas se quedo casi sin comer pues llevaron todos los platillos solo el de ella no, hasta casi al final cuando ya todas estábamos terminando, las bebidas son riquísimas, el frappe de Oreo super recomendado, el chocolate caliente igual, el brownie le hace falta sabor, y en la decoración igual podrían ponerle una pequeña bola de helado al servirlo o un diseño de azúcar glass, la verdad si volvería, en la primera vez que fui servían ambos accesos, y esta segunda vez entre y salí por el frente je.

Lugar un poco sucio, al entrar se percibe basura que dejan otros comensales. Si entras al baño no hay agua te dan una cubeta. Los sándwiches pequeños y con muy muy poco producto; aunque no de mal sabor. Poca tolerancia a los niños. El personal femenino se tomó a mal (haciéndole gestos y comentarios de desaprobacion) y sin importancia de que mi hija de seis años les pidiera cosas educadamente y por favor para acompañar sus alimentos, que por cierto están en la carta y por los cuales pagué cada peso.