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Recensioni
Contribuisci feedbackFuimos tres veces para cenar, pues el restaurante del hotel estaba demasiado caro, y las tres veces genial. Tapas generosas, el secreto ibérico, los bocadillos de carne de costilla desilachada, las hamburguesas muy buenas. No hubo nada que no estuviera bueno. El servicio super atento y diligente, lo llevan gente joven pero muy bien llevado.
No es un restaurante gourmet, no tienen menú degustación, no parece más que un bar de pueblo...Pero ¡¡Que sorpresa!! Comida con mucha calidad y varios puntos de creatividad. Se nos hizo difícil elegir en la carta; todo súper apetecible.Los camareros no podían ser más majos; incluso nos recomendaron pedir menos (y acertaron)Dejad sitio para los postres, originales y riquísimos
Entramos a este bar 2 adultos y un niño en Viernes Santo a las 15:30 y preguntamos al camarero con gafas si tenían algo para comer. Nos respondió que no había nada, le pedí por favor si podía hacerle un bocadillo para el niño y su respuesta fue rotundamente no. No sé si volveré a Cuacos, pero si regreso, no pasaré ni por la puerta.
Experiencia muy desagradable. Nos dijeron que podíamos sentarnos dentro, y nos ignoraron literalmente todo el tiempo que estuvimos allí, mientras tanto en la ventana que daba a nuestra mesa, un grupo fumaba porros y estábamos con niños pequeños, se lo dijimos al camarero y nos contestó que ahí no había nadie, al insistirle en que sí, al final fue de mala gana...Lo que nos hizo finalmente levantarnos e irnos fue ver a otro de los camareros estornudarse en la mano y no limpiarse...Si no eres de la zona y no tienes pensado ir a tomarte unos cubatas mejor busca otro lugar para cenar...
Platos elaborados, muy ricos. Genial relación calidad-precio.Local cuidado en plena plaza con personal muy amable. Volvería sin duda