Guacamayas De Química

Buenas guacamayas (Tortas de chicharrón) les puedes poner aguacate y huevo cocido. la salsa pica mucho.

La primera vez que me dijeron pues comemos guacamayas ¿no? mi pensamiento fue creo que no es correcto como nunca me he cerrado a las posibilidades dije esta bien, agarramos el carro y tomamos rumbo hacia química, el estaciono el carro y me dijo llegamos, vi a un señor vendiendo chicharrón y ahí fue donde me intrigó volteé a ver a mi novio y le dije no entiendo, ¿qué no íbamos a comer guacamayas? el botado de risa me abraza y me dice eso vamos a comer. Me quitó un gran peso de encima cuando le di cuenta que las guacamayas son una torta de chicharrón, con huevo cocido, aguacate y pico de gallo; desde entonces siempre estaba en Gto procuraba ir a comerlas y ya viviendo aquí empecé a prepararlas en casa (se convirtió en la comida quincenal de los domingos).

Las guacamayas son unas aves bellísimas que difícilmente se pueden ver en Guanajuato a menos que vayas al zoológico de León. También se le conoce como guacamaya al bolillo con chicharrón. No sé, ¿cómo? o en que momento a alguien se le ocurrió meterle chicharrón duro a un bolillo, añadirle salsa roja bien picosa, y bautizar a este tremendo invento como Guacamaya (bravo). Pero lo que sí se, es que es de esos antojos, que sabes te harán sentir culpable después de comerlo , pero al cual no le puedes decir que no. Este señor, porque no es un puesto como tal, sino más bien un señor con su canasto; lo encuentras diario al medio día y hasta tarde frente a la escuela de química, en Noria Alta. Prepara unas guacamayas con aguacate o con huevo cocido, que estan bien picosas, pero bien ricas. Es un antojo pero algunos las comen en el almuerzo o comida porque en pocas palabras, son tortas de chicharrón.

Sé que algunos me podrán criticar por comer en este lugar cuando vean las fotografías, pero la verdad es que estas guacamayas cuestan 15 pesos y tienen todo, huevo cocido, aguacate, chicharrón y salsa, ese jugo con trocitos de chile de árbol que pica, pero me encanta porque así somos, nos hace sufrir y moquear, nos hace sentirnos vivos, nos encanta sentir esa sensación de calor y picor en la lengua que nos provoca lagrimear. El lugar donde puedes encontrar estas guacamayas es una banqueta manchada de salsa y sabrá Dios de qué otras cosas más, pareciera que el señor ni se molesta en limpiar porque a sus clientes no les importa. Todas las veces que he ido he terminado con unos retortijones en el estómago horribles y sí, digo todas porque no sólo he ido una vez aunque siempre me suceda lo mismo, pero debe ser por la salsa, porque a mis amigos no les sucede lo mismo,