Restaurante Barrenola - Moralzarzal

¡Es la primera vez que voy y me ha encantado! Destaca por la amabilidad y la atención del servicio de mesa, así como por los postres maravillosos, ¡una cocina de alta calidad! Solo le pondría un pequeño pero: la calidad de la carne no estaba a la altura de su cocina, era un poco de ganso, aunque estaba excelentemente preparada. Los helados artesanales son un verdadero placer para los sentidos. Sin duda repetiré, y la próxima vez probaré un pescado.

El ambiente es muy bueno. El trato del personal es genial, las camareras que nos atendieron, lo hicieron de una forma muy cordial y simpática. Los precios están en la media y el tamaño de los platos es suficiente. La hamburguesa esta muy buena. Hay p Aparcamiento en los alrededores. El único problema a mi juicio es que ni en la terraza te dejen entrar junto a tu perro (bien educado)

Es sin duda una referencia en la sierra. Han pasado unos años, pero lo hacen muy bien, y eso se debe al chef. Es un lugar donde la calidad es excelente. Puedes optar por la zona del restaurante si deseas rendir homenaje, o quedarte en la zona de abajo y disfrutar de unos pinchos. Durante la semana también ofrecen menú. Ayer fuimos y probamos algunos pinchos (bacalao con alioli de mostaza y miel; langosta de pene con guacamole; mini-hamburguesas de ternera y una de cochinillo, además de un torrezno). Cada pincho cuesta 2,5 € y son bastante buenos, en especial el torrezno, que es diferente de lo que suelen servir; lleva cebolla crujiente encima. Nos encantó probar los pimientos del piquillo rellenos de bechamel trufada, ¡estaban deliciosos! Para terminar, compartimos una crema de mascarpone. Viene acompañada de un toque de chocolate salado y helado de maracuyá, una combinación de sabores realmente buena (especialmente si no eres fan de los postres demasiado dulces). Bebimos dos Coca-Colas, dos dobles y una caña, todo por 37 €. No te lo pierdas.

Buen trato por parte del camarero y una terraza muy agradable. Estuvimos en julio disfrutando de unos aperitivos en la terraza. Pedimos una cerveza, una coca y unas bravas. La atención fue rápida y además nos trajeron algunas alitas que estaban bastante bien. Después pedimos unas bravas con buena salsa. El servicio fue rápido y la cocina de calidad. Sin duda volveremos a cenar y a dejar otro comentario.

Démosles tiempo. Los mimbres son, se abrieron. buen género bien tratado, son las festividades en la moral. buen pierador de filete, cromo de 10 tksangurro, excelente micuit, torrija algo seco pero rico. Seguiré este sitio de cerca. (había más patatas en el bistec. Los comí antes de la foto: Regresé y, como podía esperar, todo ha mejorado. Sólo la carne era mejor. los postres, las lágrimas. espectacular. todo lo demás, rezando por la perfección. pulpo, croquetas, etc. gran restaurante