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Contribuisci feedbackElegimos este restaurante para celebrar el 18 cumpleaños de mi hermano, pero la experiencia no fue la mejor. Durante la comida, las esperas fueron bastante largas, especialmente para el primer plato. Pedí tres veces si llevaba cebolla triturada el arroz con bogavante y las tres veces me aseguraron que sí, pero en realidad llevaba cebolla en grandes cantidades. También tuvimos que pedir varias veces pan y agua, ya que lo traían todo justo para 6 personas con solo una botella de agua y una de vino. La gota que colmó el vaso fue cuando nos trajeron el café antes que el pastel, y al hablar con la camarera nos dijo que tenían 5 cumpleaños y 5 pasteles y no sabían cuál era el nuestro, todo esto con el cumpleañero sentado a la mesa. Fue una experiencia muy decepcionante que arruinó su 18 cumpleaños.
Hemos estado toda la familia, unos 20. Tienen varios menús para grupos: 18, 20, 25 y 35 euros, y otros... Todos empiezan con un pica pica común para todos los comensales (aunque con platos diferentes según el precio), menos el de 18 que sólo es pica pica, y con un segundo plato a elegir, postres y vino de la casa (flojo) o sangría, agua. En general es producto es bastante bueno...comimos todos el menú de 25 euros con un pica pica de ensalada de queso de cabra, gambitas fritas, tostada de jamón ibérico y croquetas caseras, después una oferta que incluye carne, pescado y sepia. Hay otros menús diarios y menú de caracoles, mariscada, calçotada y arroz caldoso. El precio, por la calidad del producto lo encontré un poco caro, y el pescado que te ofrecen en este menú es sólo bacalao. Tostadas, alcachofas y berenjenas muchas de ellas quemadas. Como en muchos restaurantes...el café bastante malo. El local es pequeño, con doble piso restaurante en el que han querido aprovechar mucho el espacio..los camareros no pueden pasar sin pedir paso y estás muy apretado. No es un restaurante adaptado, ni en la entrada y cuando entras ya hueles a comida...y cuando sales la ropa te hace olor a comida. No creo que vuelva.
Fantástica calidad, fantástico precio, servicio rápido. Para el día a día un sitio ideal donde ir.muy recomendable. Puedes ir con clientes o jefes que vas a quedar estupendamente.
Regresamos después de tiempo sin ir. Volvimos para comer el menú en día laborable. De primero comimos paella y nos sorprendió que el arroz nos lo sirvieron caldoso, la verdad estaba bueno de sabor pero bastante escaso de cantidad. A los segundos platos les faltaba un toque de decoración. Por estos pequeños detalles nos fuimos con la sensación de que nos faltaba algo.
Fuimos en domingo en familia y con niños. Pedimos el menú normal y 3 menús de calçotada. El servicio era muy lento, con una sola camarera para atender todo. Los calçots estaban fríos. Hubo una falta de coordinación total y mucha lentitud en traer los segundos platos, salsas y bebidas. No creo que volvamos.