La Caseta De Madera

Atención desastrosa por parte del encargado de hacer bocadillos. Es un incompetente y no tiene idea

Si te gusta un sitio donde te ignoren, se hagan los locos o pasen de ti, este es tu lugar. Siempre con una sonrisa, eso sí

Los camareros nos han atendido muy rápido y eficientemente y la comida muy buena, se nota que la materia prima es buena.

Las veces que ido solo he probado pulga o bocadillos de tortilla o pollo, debo decir que cuando pides con ensalada son de los pocos sitios que ponen lechuga, tomate y cebolla como debe ser... Son bocadillos con mucho sabor, buenos y bien ejecutados por el planchistas. Los camareros en general son amables y en especial una chica que te atiende rápido, amable y profesional... No regalo oidos solo valoro bien cuando lo veo. De mis sitios preferidos en La Laguna

Primero pedí una pulguita de mechada y tardaron 20 minutos en decirme que no había mechada. Luego tardaron otros 20 minutos en atenderme así que decidí ir a la barra a pedir yo misma, cuando vinieron atenderme a la mesa por lo menos me pidieron perdón y aceptaron la responsabilidad, no como el hombre de la barra que al decirle que llevo 20 minutos me dice que “es que estamos hasta arriba, atendemos cuando se puede” y al responderle que habían atendido a 5 personas por delante mío cuando yo había pedido mucho antes, se encoge de hombros y me dice que la compañera irá con un tono que casi parece que me esté haciendo un favor. Decido pedir un pan de calamares (me dicen que van a tardar y les digo que no hay problema) y después de otros 15 min más o menos me vienen a la mesa a decir que como están tan llenos, el cocinero NO QUIERE meterse a hacer unos calamares, QUE PIDA OTRA COSA (como dato, había gente comiendo hamburguesas, una mesa vacía y dos personas dentro y otra atendiendo fuera). Finalmente pido una pulguita con queso blanco, esperando que no tarden más de 5min en abrir un pan, meterle un queso y calentarlo, pero por supuesto, nunca llega, otros 20min después decidimos ir a la barra y pagar los cafés que habíamos pedido hacía al menos 1 hora y media, así que en resumen, perdí 1h y media esperando a comer algo que nunca llegó. Lo único que puedo salvar fue la atención de la camarera, aunque al principio tardó, reconoció su error, pidió disculpas, fue bastante amable y pagó los cafés como disculpas, aunque insistimos en pagarlos. NUNCA ME HABÍAN TRATADO TAN MAL, no había tenido que esperar tanto por un pan.