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Contribuisci feedbackHicimos la visita un grupo de amigos. Elegimos la visita con degustación de 3 vinos. el precio era 12€ por persona, y la verdad que la visita nos amaba. las bodegas son muy cuidadosas, tienen un toque moderno pero conservan la tradición. Explicaron todo el proceso de elaboración de los diferentes vinos, la forma de la añada de la zona, y terminamos la visita con la degustación explicando cómo saborear cada vino en detalle. Finalmente tomamos el vino en la terraza con hermosas vistas del cañón de sil. la chica que hizo la visita, pilar, era muy agradable y notó que ella tenía una amplia experiencia. visita muy recomendable!
La verdad es que no tengo el vino, pero me encantó la experiencia. Hemos contratado la visita guiada con 3 catas de vinos. la bodega es impresionante y las vistas espectaculares. el personal le ofrece una atención de 10 minutos. Te guían a través de la bodega y te acompañan a la zona de degustación donde después de una explicación sencilla y agradable hemos probado 3 de los productos y nos hemos permitido terminar las copas en esa espectacular terraza con vistas a los cañones. inolvidable! ha sido nuestro regalo para la familia desde fuera de Galicia y han sido fascinados.
Excelente experiencia, mi pareja y yo fuimos por primera vez a una degustación y conseguimos tanto que tomamos tres de tan vinos y una crema agria. muy cerca del acuerdo, con detalles sobre la producción, tienen una espectacular terraza con hermosas vistas. una experiencia que amamos completamente. dentro de las opciones que elegimos la degustación de cinco vinos, es muy fácil reservar desde el sitio web.
Nos ha encantado la visita así como su entorno. Nuestra guía ha sido Pilar y nos ha gustado mucho lo que nos ha explicado. La bodega en sí es pequeña pero está muy bien preparada para las visitas y su mirador hacia las parras y el Sil es espectacular. Ya solo por eso, merece la pena su visita.
Una experiencia inolvidable. El entorno es espectacular. La finca está cuidada al detalle. Hay varios miradores desde donde se tiene una perspectiva privilegiada del cañón y las viñas. Hicimos una visita guiada con cata al final. La explicación es interesante y amena. Pudimos llevarnos un perrito pequeño que llevamos siempre en brazos. Experiencia recomendable para cualquier persona, de 10.