Angel Marina - Valdeolmos-Alalpardo

Lo primero que llama la atención es la amabilidad y cercanía del personal. La carta tiene una gran variedad de productos, nos ha costado decidirnos por alguno porque todos tenían muy buena pinta. Hemos comido de entrantes parrillada de verduras, ensalada de pimientos asados, calamares, lacón y picadillo de matanza. Todo estaba delicioso y abundante, así que ya nos imaginábamos lo que nos esperaba para el segundo plato. Lubina a la plancha, cordero, cochinillo, entrecot, pulpo a la brasa... Simplemente exquisito todo. Sin lugar a dudas ha sido un gran descubrimiento este restaurante y volveremos pronto porque es difícil encontrar un lugar donde la comida sea casera al 100%, exquisita y abundante, y donde los camareros sean amables y simpáticos.

Es un placer poder visitar este restaurante cada vez que paso por Madrid. La comida es casera, el trato es muy amable y el servicio es excelente. La relación calidad-precio es inmejorable. Sin duda, volveré muchas gracias.