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Recensioni
Contribuisci feedback Cosa non piace a Valdas Simas di Casa da Igreja:
la posizione è spettacolare, sulla piazza della chiesa che dà direttamente sulla laguna e sull'oceano. La valutazione si riferisce al fatto che il ristorante è chiuso (temporaneo senza alcuna indicazione di orari di apertura giornalieri. La ricerca sul web sono tempi di tipo 13.00-3.00 o 16.30-22.30 ma nessuno di loro era corretto. Forse giovedì è il giorno di chiusura? Peccato. Visualizza tutti i feedback.
Really nice place for a fresh fish, ousters and wine. Or a gamba. Take your time is a popular place. Wait time 40 minutes. But with a bottle of wine is isn't a problem
As melhores ostras da ria formosa. As ameijoas tb sao uma delicia, as gambas, o presunto. É tudo bom nesta casa. Vale a espera por uma mesa.
Una auténtica vergüenza de sitio. Hemos estado hoy mismo, los segundos en cola desde las 7 (la hora en la que abren). Adoramos Portugal y nunca me he sentido tan mal tratada. Nos atendieron con bromas y tonitos, imitando el acento español. Nos resultó raro, fuera de lugar, pero no le dimos mas importancia. Tardaron en tomarnos la comanda, unos 40 minutos en que pudiéramos pedir siquiera la bebida. Tuvimos que llamarles para poder pedir. Al final lo hicimos, pedimos y estuvimos más de 1 hora más esperando. Íbamos con niños y había pasado ya 1.40. Entonces les pedimos que por favor les pusieran la comida a ellos. La respuesta fue que los platos tardaban en salir media hora más. Les dijimos que no íbamos a esperar eso y que nos íbamos (1.40+30 minutos más). Y tienen la desfachatez de traernos la cuenta de las bebidas (para eso no tardaron nada). Además sin disculparse y con unos modos de vergüenza: gritos y gestos de violencia. Nunca me he sentido tan mal tratada en un restaurante. Pagamos porque tenemos educación, pero no se merecían un duro. Una hora de espera y de bebidas absurdas (que dejamos a medias) sin una disculpa y aguantando a gentuza impresentable. Me siento estafada: me han robado tiempo y dinero y no he cenado. Incluso, si lo pienso fríamente, podría ser una táctica engañaturistas. Vergüenza de restaurante.
Situado en la pequeña aldea de Cacela a Velha (junto a Manta Rota), este pequeño restaurante familiar es un encanto, aunque está de espaldas al mar, tiene una amplia terraza con vistas a la campiña algarvia. Se empieza siempre con las tradicionales entradas, pan, mantequilla, un quesito y el clásico paté de sardina portugués. A continuación podemos saborear pescado fresco del día, distintos platos de bacalao, ostras de la ría y especialidades locales como arroz de marisco, cataplana y choquiños a la algarvia. De postre no faltan las tartas con almendras o algarrobo, que son los productos locales. El precio es muy buena y la relación calidad/ precio excelente, por eso en verano, o los fines de semana de primavera, acude muchísima gente tanto de Portugal, como de España y, como no reservan mesa hay que apuntarse a una lista y a veces es necesario esperar pacientemente en las sillas que colocan en la terraza hasta oir nuestro nombre. Por supuesto es imprescindible aprovechar para dar un paseo por la pequeña aldea, donde no falta iglesia, cementerio y fortaleza y asomarse a los miradores con vistas espectaculares sobre la ría Formosa y la península arenosa de Cacela.
Situado en el pequeño pueblo de Cacela a velha (junto a manta rota), este pequeño restaurante familiar es un encanto, aunque está de vuelta al mar, tiene una gran terraza con vistas al campo de Algarvia. Siempre comienza con entradas tradicionales, pan, mantequilla, queso y la clásica pate de sardina portuguesa. Luego podemos probar pescado fresco del día, diferentes platos de bacalao, ostras del río y especialidades locales como el arroz de mariscos, cataplana y salchichas a la algarvia. Los postres no faltan con almendras o algarrobo, que son productos locales. el precio es muy bueno y la relación calidad/precio excelente, por lo que en verano, o en los fines de semana de primavera, hay muchas personas provenientes de ambos portugal, y de la araña y, como no se reserva mesa, tiene que apuntar a una lista y a veces es necesario esperar pacientemente en las sillas que colocan en la terraza hasta que escucha nuestro nombre. Por supuesto es esencial dar un paseo por el pequeño pueblo, donde no hay iglesia, cementerio y fortaleza y mirar los miradores con vistas espectaculares sobre el río Formosa y la península de arena de cacela.