Donde Pilar - Zaragoza

Decepcionante. Fuimos con altas expectativas por las opiniones y recomendaciones. Pedimos unas sopas de ajo que estaban buenas. A continuación un cachopo, y sólo uno porque no había más, que estaba bueno. Pedimos los afamados y premiados caracoles que estaban pasadísimos de pimienta negra, y unas manitas de cerdo y una carrillera que fueron lo mejor de la cena, estaban excelentes. Cabe señalar que las botellas de vino las traen ya abiertas a la mesa, un feo detalle. Así como también fue un feo detalle que no quedase ningún postre, un sábado a las 22:30 de la noche, y no se ofreciese ninguna alternativa ni compensación alguna como, por ejemplo, invitar a los cafés o a un chupito. Al día siguiente, dos de los comensales tuvimos claros síntomas de intoxicación: descomposición y granitos por la cara. Quizás el medio bote de pimienta negra en los caracoles estaba allí por algo.

No volveré a un bar donde me cobran 14€ por una ración de caracoles que además estaban muy blandos. Las croquetas con demasiada pasta y poco contenido.

¡Todo EXCELENTE! Comida casera a super buen precio y con un servicio estupendo. Muy atentos. Recomiendo especialmente, además de la tortilla de patata que es la mejor de toda la zona, los huevos fritos con Cabrales y sus caracoles, ganadores del premio de Zaragoza.

Muy buen servicio y ambiente familiar un sitio al q iria una y otra vez sobretodo por la tortilla de patata y la ensaladilla casera

Trato familiar y comida muy buena. Sus croquetas geniales! Para comer, picar o cenar . Un sitio excelente !!!recomendable