Hermosilla - Beteta

La comida casera fue excelente. No dejamos nada en los platos.

Para una comida en el único lugar de la zona donde encontramos un cajero y algo justos de tiempo decidimos no complicarnos la vida y entrar en este bullicioso local. Queríamos comer sentados porque tenemos un niño pequeño y nos dijeron que tenían dos mesas en la parte de arriba. Efectivamente había sólo dos mesas pequeñas en un rinconcito. Sin más demora nos pusieron una lentejas increíbles absolutamente caseras, unas croquetas y un revuelto. Todo casero y estupendo. Pero las lentejas de libro. Me encantaron. Con café unos 25 euros dos personas. El servicio es el de un bar donde nos atendieron parte arriba y parte tuvimos que pedir en barra. Pero la comida merece la pena si quieres comer bien, barato y casero.

Frente a la escasez de restaurantes en el Alto Tajo, el Hermosilla es una excelente opción para disfrutar de ricas tapas como lomo de orza, tortilla de patatas, croquetas de cocido, albóndigas de caza, pisto con huevo, a un precio muy asequible. Lo único negativo son las mesas pequeñas, pero el servicio es diligente. ¡Volveremos!